Una lista exhaustiva sobre los must de la capital lombarda, para disfrutar al máximo tu estadía. Lugares icónicos, nuevos y secretos para descubrir una ciudad fascinante.
Las mejores cosas para ver en Milán
Si pensas que Milán es solo shopping y moda, estas muy equivocad@. Escenario de los principales acontecimientos de la historia italiana, un legado arquitectónico y artístico alucinante, y un torbellino de vanguardia y diseño moderno, hacen de Milán una de las ciudades más cosmopolitas, europeístas y brillantes de toda la península.
A continuación una lista – en constante aggiornamento – sobre los mejores lugares y actividades para hacer cuando visitas Milano.
Duomo
El primer lugar al que vas a ir. La plaza del Duomo es el corazón de la ciudad y la catedral gótica más alta de Italia te dejará sin aliento apenas la veas. Para visitarla por dentro y subir a la terraza, es mejor si reservas ticket. Subiendo por la escalera, cuesta un poquito menos. La mejor hora es siempre el atardecer. Con más de 3 mil estatuas en su parte externa, el Duomo esconde leyendas y mucha historia. Para ver los vitrales externos, mejor admirarlos de noche, cuando además, hay menos gente en la plaza. Para tomar un café, el Mc Donalds tiene una buena vista a la plaza aunque 12Oz tiene también buena vista pero mejor café.
Para cenar, el Restaurante Vista Duomo es un poquito caro pero la mesa del segundo piso vale realmente la pena. Con más de 3 mil estatuas en su parte externa, el Duomo esconde leyendas y mucha historia. Para ver los vitrales externos, mejor admirarlos de noche, cuando además, hay menos gente en la plaza.
Galería Vittorio Emanuele
Pegado al Duomo y casi por inercia, uno termina adentro de la galería más linda del mundo. Construída a finales del 1800 y dedicada al primer Rey de Italia, la Galería Vittorio Emanuele es el salotto de Milán.
Refinada, exclusiva, lugar de paso obligado por quien camina por el centro, es un tesoro de leyendas e historia. Un aperitivo al paso en el Bar Camparino, o un café en el segundo piso de Pasticceria Marquesi no te costará un ojo de la cara como estas pensando.
Teatro alla Scala
Atravesando la galería se llega a la Plaza alla Scala, la plaza cívica más importante de la ciudad, donde se encuentra el Comune de Milán (Palazzo Marino) y el reconocido teatro alla Scala, la cuna de la lírica y la ópera italiana.
Con un estilo neoclásico, construído durante la ocupación austríaca, por fuera la Scala nos puede parecer simple y discreto, pero por dentro es una verdadera joya. La entrada al museo no vale mucho la pena si no es guiada (en inglés o italiano) mejor si se consigue una entrada con tiempo con super descuento.
Piazza dei Mercanti
¿Cómo era Milán en la edad media? La plaza del mercado nos puede dar una idea. Restaurado post pandemia, este mercado techado creado en el 1200 se ha convertido hoy en un memorial a la resistencia y a los caídos durante el nazifascismo.
Cuenta la leyenda que los agujeros de las paredes permiten una comunicación a través de susurros, y que el pozo de los fracasos servía para castigar a todos los que caían en bancarrota.
Iglesia San Sátiro
A pasos de la Plaza del Duomo, esta pequeñísima iglesia pasa desapercibida entre los negocios de Via Torino. Proyectada por el genial arquitecto renacentista Donato Bramante, esta iglesia tiene un interesante efecto óptico con el cual, el altar parece mucho más grande de lo que realmente es.
El lugar se completa con una gran colección de estatuas de terracota, y una máquina que poniendo un euro, ilumina el cuello del niño Jesús, donde cuenta la leyenda, al ser apuñalado, sangró.
Última Cena de Leonardo da Vinci y Santa María delle Grazie
¿La obra más importante y trascendental de la ciudad? A mi juicio, sí. El mural de la Última cena de Leonardo (llamado en italiano el Cenacolo), es una visita a la que no podes renunciar si visitas Milán. Es muy difícil conseguir entradas de un día para el otro, mejor reservar y con tiempo.
Lo que si podes ver gratis es la iglesia Santa María delle Grazie, la cual tiene una parte realizada en el 1200, y otra restaurada por el Bramante en el 1400, a pedido del Duque Ludovico el Moro. Al frente de Santa María se puede visitar además la viña y casa donde vivió Leonardo.
Pinacoteca Ambrosiana
Amantes de Leonardo y de visitar museos, a su juego los llamaron. El museo más lindo de la ciudad, también el más caro pero el menos concurrido. Si elegís visitarlo, dedicale el tiempo que se merece. Esa parte del centro, con sus callecitas estrechas y silenciosas, tienen un encanto peculiar.
Además de preciosas pinturas renacentistas flamencas, lombardas y venecianas, vas a encontrar obras de gran importancia, como el magnífico Cartón preparatorio para la Escuela de Atenas de Rafael, la Cesta de frutas de Caravaggio, el Músico de Leonardo y el Codex Atlanticus.
Museo del 900
El edificio donde se encuentra este museo es llamado el Arengario, construído durante el fascismo, esos balcones supieron ser el escenario de uno de los momentos más amargos de la historia italiana. Hoy, convertido en Museo, alberga lo mejor del arte moderno, justamente del 1900.
Acá vas a encontrar el mítico El Cuarto Estado de Giuseppe Pellizza, además de la colección de arte futurista más grande del mundo, justamente porque ese movimiento de vanguardia nació en Milán a fines del 1800. El bar que se encuentra dentro, el “Arengario”, es un verdadero lujo.
Castello Sforzesco y parque Sempione
La perla de Milán. Este castillo medieval de acceso gratuito muestra a través de sus paredes de ladrillo, la historia misma de esta ciudad. Este complejo hospeda más de 10 museos, entre los que se pueden encontrar obras de Da Vinci, Miguel Ángel, Filippo Lippi, Antonello da Messina, Andrea Mantegna, Tiziano y Canaletto, entre otros.
Pasando el castillo se llega al Parco Sempione, uno de los parques céntricos más lindos de la ciudad, el cual por lo general, tiene actividades organizadas por el Comune. Al final del parque, verás el Arco de la Paz y una zona de bares ideal para hacer aperitivo.
Navigli
Los canales de Milán, que un tiempo sirvieron para transportar el mármol del Duomo, son uno de los paseos más interesantes cuando venís a Milán. El Naviglio Grande se encuentra con el Naviglio Pavese y forman la Dársena, un lago artificial pegado a Porta Ticinese.
Bares, mercados, tiendas de diseño y mucha movida joven, esta zona de la ciudad es un imprescindible para hacer un aperitivo o visitar alguno de sus mercados itinerantes. El mercado del antiquariato está el último domingo de cada mes, mientras que el mercado agrícola está todos los sábados hasta las 14.
Pinacoteca de Brera
El museo más emblemático de la ciudad – y el más conocido-. Ubicado en el barrio de Brera, la Pinacoteca es además la Academia de Bellas Artes Fundada por Napoleón Bonaparte como la hermana del Louvre, se pueden encontrar obras maestras del arte universal como el Cristo Morto (Andrea Mantegna), el Sposalizio della Vergine (Rafael) o el famoso Il Bacio (Hayez).
Una vez afuera, el barrio de Brera es uno de los más fascinantes de la ciudad. Calles minúsculas peatonales es el lugar preferido de artistas, creativos, estudiantes e intelectuales milaneses. Para una pausa café, el bar Save the Food tiene mesitas frente a la iglesia Santa Maria del Carmine. Re lindo.
Cuadrilatero de la moda
¿Queres saber qué está de moda? Este es tu lugar. Un punto de referencia del Shopping de lujo mundial, este lugarcito en Brera se llama así porque está delimitado por cuatro callecitas prestigiosas: via Montenapoleone, via Manzoni, via della Spiga y Corso Venezia.
Las boutiques y tiendas exclusivas de los diseñadores de alta costura italianos se encuentran en el Quadrilatero de la moda. Pero además de tiendas, el Quadrilatero reboza de museos como el Museo Bagatti Valsecchi y el Palazzo Morando. Un par de zapatos puede costar lo mismo que un 0 km.
Basílica de San Ambroggio
Esta iglesia toma su nombre del santo patrón de la ciudad, y la primera planta fue construida en el mismo sitio en 386. La basílica actual, una de las más antiguas de la ciudad, fue terminada en 1099.
En el interior se puede ver el sarcófago de Stilicone y la cripta, donde se encuentran los restos de Sant’Ambrogio, San Gervasio y San Protasio. Muy poco transitada por turistas, vale la pena una visita.
Museo de la Ciencia y la Tecnología
Cerquita de San Ambroggio, el Museo Leonardo Da Vinci es ideal para ir con niños. Muestra interactiva, pueden encontrarse modelos reales de los alocados inventos del genio de las artes hechos a escala. ¿Un helicóptero? ¿Un paracaídas? ¡A quien se le ocurre algo tan disparatado en pleno renacimiento!
Cuenta con un gran calendario de actividades y muestras, se puede conocer en el patio al Toti, el primer submarino construido en Italia después de la Segunda Guerra Mundial.
San Siro Estadio
El estadio Giuseppe Meazza, ícono del fútbol milanés está por ser reestructurado. Mientras tanto, la casa del Inter de Milán y del Milan, ofrece un recorrido fantástico para los amantes del fútbol.
Si el calendario lo permite, mejor verse una vera partita en vivo. Se llega facilísimo con el Metro M5 lila, tiene una capacidad de 80018 espectadores siendo el mayor estadio de Italia.
Estación Central y Corso Buenos Aires
Tarde o temprano vas a terminar en la Stazione Centrale de Milán. Acá llegan los autobuses del aeropuerto pero también salen los trenes para ir al Lago de Como. Inaugurada en 1931- en época fascista – la belleza de la estación es impactante.
Desde hace poco funciona el Mercato Centrale, ideal para comer al paso en puestitos cool, ver un poco de arte y productos artesanales. En frente de la Estación, en el rascacielos Pirelli o Pirellone, fue por muchos años el edificio más alto de la ciudad. Saliendo de la estación, se puede llegar fácilmente a Corso Buenos Aires, ideal para hacer un poco de shopping low cost.
Palazzo Reale
A un costado del Duomo, el Palazzo Reale durante muchos siglos fue sede del gobierno de la ciudad de Milán, del Reino de Lombardía-Venecia y luego residencia real hasta 1919, cuando fue adquirida como propiedad estatal y se convirtió en sede de espectáculos y exposiciones.
Ya visitarlo por su riqueza arquitectónica vale la pena, la obra permanente es siempre gratuita y por lo general hay muestras pagas más que interesantes. Antes de irse, un café al paso en Giacomo, el bar que se encuentra dentro del patio.
Porta Venezia
PH: wearegaylyplanet.com
El corazón LGBT de Milán, epicentro del Gay Pride (en junio), Porta Venezia es el mejor lugar para salir de noche, con la gran variedad de bares, restaurantes y propuestas culturales. Acá podes recorrer lugares históricos en la lucha por los derechos de las diversidades sexuales como Lelephant, Mono, Leccomilano e Redcafè.
Acá se encuentra, además, el Corso Buenos Airesm uno de los paseos comerciales más largos de Europa, y el parque Giardini Indro Montanelli, además del planetario y el Museo Civico di Storia Naturale. Una zona para apreciar la arquitectura Liberty.
Acuario de Milán
PH: acquariodimilano.it
El Acuario y Estación Hidrobiológica de Milán es uno de los más antiguos del mundo. Ubicado en el Parque Sempione, se puede visitar por el bajo precio de €5.
El espacio interior incluye recorridos didáctico-expositivos con numerosos estanques de agua dulce y marina que contienen más de cien especies de organismos acuáticos. La biblioteca, abierta al público, es una de las más prestigiosas en el campo de la biología marina.
San Bernardino alle Ossa
La famosa iglesia decorada con huesos de Milán. Este osario tiene orígenes muy antiguos y es sin duda uno de los templos religiosos más extraños de la ciudad.
A través de un pequeño pasillo se llega a este enigmático y pequeño lugar cuyas paredes están totalmente recubiertas de calaveras y huesos humanos. Inquietante, macabro, hasta un poco rococó, este lugar tiene una energía única. Con entrada grautuita.
Cementerio Monumental
Un paseo entre las tumbas de los personajes más conocidos de la ciudad, donde el arte se expresa con estatuas y mausoleos propios de un museo. El Cementerio Monumental de Milán.
Con sus 250.000 m2, tiene entrada gratuita y es un excelente paseo para un día primaveral. Entre mis estatuas preferidas, la de los fundadores de la famosa Campari, donde se recrea una Última Cena pero con los discípulos tomando una copa.
Piazza Gae Aulenti
Diseñada por el arquitecto argentino César Pelli e inaugurada en 2012, la plaza forma parte de uno de los proyectos de remodelación urbana más grandes e importantes de Europa. Una ventana al futuro y a la arquitectura sustentable que marca tendencia en el mundo.
En las inmediaciones de la plaza, podrás encontrar el famoso Bosco Verticale, uno de los nuevos edificios icónicos de Milán, la proximidad a Corso Como y al barrio de Isola lo colocan en una posición estratégica para la vida nocturna.
Barrio Isola y Porta Garaibaldi
El barrio frente a la estación Garibaldi fue objeto de una profunda transformación y remodelación urbana, que culminó a principios de la década de 1910 con la construcción de los rascacielos del proyecto Milano Porta Nuova que cambió para siempre el horizonte de la ciudad. Lo más parecido a NYC.
Porta Garibaldi es uno de los principales puntos de acceso a Milán gracias a la estación de tren y metro, con trenes que sirven rutas tanto regionales como nacionales e internacionales (como el TGV a París).
Chinatown
La Vía Paolo Sarpi, la arteria principal del barrio chino de Milán, se ha convertido en una de las zonas más de moda de la ciudad. Este paseo peatonal, conecta Corso Sempione con Porta Volta y Porta Nuova, en un enjambre de clubes nocturnos e importantes lugares culturales.
El Año Nuevo Chino (entre el 21 de enero y el 20 de febrero) es el mejor momento para sumergirse en el folclore con sabor oriental. Entre septiembre y octubre, sin embargo, se celebra la Fiesta del Medio Otoño, otra importante fiesta dedicada a la cosecha.
Iglesia de San Maurizio
Desde el exterior, San Maurizio al Monastero Maggiore parece una iglesia cualquiera y pasa desapercibida mientras se camina por Corso Magenta. Sin embargo, es uno de los tesoros mejor guardados de Milán.
Era el monasterio femenino más grande y antiguo de la ciudad; se comenzó a construir en 1503 y contiene frescos en cada rincón. El fresco del Arca de Noé, el favorito de los chicos, tiene incluso un unicornio.
Piazza Affari
De arquitectura racional, construída durante los años del fascismo para dar sede a la bolsa de valores más importante del país, Piazza Afarri es un oasis escondido en pleno centro de la ciudad.
En medio de la plaza, una de las estatuas más controversiales de Milán, donde su creador Maurizio Cattelan, retrata una mano con un gran fuck you de mármol, con el resto de los dedos cortados. Llamada L.O.V.E., acrónimo de Libertad, Odio, Venganza y Eternidad, es también conocida como el “vaffanculo”.
Columnas de San Lorenzo
Representan uno de los pocos restos que se remontan a la era de la Milán imperial: Milán, entre los siglos IV y V, fue la capital del Imperio Romano de Occidente, y esta parte de la ciudad da testimonio de ello.
Si durante el día este lugar es amado por su historia, cuando cae el sol se convierte en uno de los puntos de encuentro para comenzar la noche, cenar o tomar el aperitivo clásico. De hecho, la posición de las Columnas de San Lorenzo es estratégica para los amantes de la vida nocturna, ya que se encuentra a medio camino entre los Navigli y la Piazza del Duomo.
La Casa degli Omenoni
A pocos pasos de la Piazza della Scala, la casa Omenoni es, sin duda, una joya de la Milán oculta. Construido en la segunda mitad del siglo XVI, la casa cuenta con una fachada de ocho telamones, todos realizados por el famoso arquitecto y escultor italiano del siglo XVI Antonio Abondi.
A principios del siglo XX corrió el riesgo de ser demolido, hasta que en 1932 se convirtió en la sede de la Federación Fascista. Para un mejor efecto, visitarla de noche.
Museo Branca
Los fanáticos del Fernet Branca sabrán, que la bebida maravillosa nació acá en Milán, y que en zona Maciachini no solo se encuentra su sede histórica sino que además, se puede visitar el museo.
Con entrada gratuita, es necesario hacer reserva y el recorrido puede ser realizado tanto en inglés como en italiano. Hay un ala dedicada solo a Argentina, especialmente a Córdoba, donde la bebida milanesa tiene récord histórico de ventas.
CityLife
Los edificios de diseño donde viven los VIP, los edificios Art Nouveau, el centro comercial. En este barrio, creado para rehabilitar un rincón olvidado de la ciudad, se respira ese anhelo de futuro que siempre ha caracterizado a la ciudad milanesa y que siempre la ha llevado un paso por delante.
El corazón del distrito son las tres torres que han contribuido a cambiar el horizonte de Milán. Diseñado por arquitectos internacionales como Arata Isozaki, Zaha Hadid y Daniel Libeskind.
©2020 - Crónicas de Milán - 
Design