Para hacer una reserva de hospedaje en Milán, es indispensable que sepas cómo es cada barrio. Si buscas hacer shopping, queres disfrutar de la vida nocturna o sos fanático del arte, Milán tiene un lugar para vos.
Milán tiene más de 180 kilómetros cuadrados de superficie, y si bien es grande, su excelente conectividad la hace una ciudad muy fácil de recorrer. Cuando uno busca dónde alojarse, es importante saber que características tiene cada zona, qué es lo que queremos hacer, y sobre todo, cómo estaremos conectados.
Según el sitio Best Location Hotels, una web especializada en recomendaciones de los mejores barrios para alojarse en las principales ciudades del mundo, el mejor lugar de Milán es el centro histórico. El Duomo, la Galería Vittorio Emanuele y la Scala de Milán estarán a un par de metros y quizás no necesites movilizarte en medios públicos. Al estar en el centro, es muy fácil moverse caminando hacia el Castello Sforzesco o el Cuadrilátero de la moda, el lugar ideal para ir a hacer shopping.
El centro te va a permitir perderte por las callecitas de Brera, visitar los museos más emblemáticos y tener las iglesias más importantes de la ciudad, sin necesidad de caminar mucho. Además, está el Parque Sempione, a la espalda del hermoso castillo medieval. La opción de hotelería en esta zona es muy vasta, eso sí: los precios son más altos que en otras partes de la ciudad. Para los más exigentes, en la Galería Vittorio Emanuele, se puede encontrar un Hotel de 7 estrellas.
Para los que buscan hacer shopping
Si venís a Milán en plan compras, el centro también es buena opción: además del Cuadrilátero de la moda, donde encontrarás alta costura, la zona que está en Corso Vittorio Emanuele, atrás de la galería, y en via Torino, al costado del Duomo, hacen del centro el lugar ideal para encontrar de todo, desde zapatos artesanales a ropa de marcas conocidas. Si los precios te parecen un poco elevado, otro lugar ideal para hacer shopping es Corso Buenos Aires. Llamado así en honor a los 8 millones de italianos que emigraron para la Argentina durante el siglo pasado, esta parte de la ciudad es un torbellino de negocios, gente y tráfico. Si no vas a gastar miles y miles de euros en ropa costosa, este es tu lugar.
Desde Loreto a Porta Venezia, esta parte está cerca del centro y también de la Estación Central; tiene muchas opciones de alojamiento de todos los precios habidos y por haber.
Estación Central
Si te vas a quedar poquito tiempo en la ciudad, vas a tomar trenes o un avión, o pensas hacer base en Milán para conocer en los alrededores, Estación Central es tu lugar ideal. La zona está llena de alojamientos de máxima categoría y de los más sencillos. Práctico: llegas al centro en 15 minutos de Metro y hay una buena oferta de bares y restaurantes. De noche, es necesario andar con un poco de atención, como en toda gran ciudad.
Isola
Este barrio es uno de los que más está en auge en los últimos tiempos. Cerca de Estación Central, del Chinatown, Porta Nuova y el Cementerio Monumental, Isola es un ambiente juvenil, moderno y agitado. Se ha inaugurado hace poco la plaza Gae Aulenti antesala del Bosco Verticale. Muy cerca de la Estación Garibaldi, el barrio está super conectado y tienen todos los condimentos para una vida nocturna divertida. Tiene además toda una impronta moderna, con rascacielos, arquitectura sustentable y nuevas tendencias. Si buscas historia, este no es tu lugar. Si buscas futuro, sí.
CityLife
Para el que viene a Milán para participar de alguna de sus ferias (Que son muchas), este es el barrio ideal. Acá se encuentra el complejo de Fiera Milano City, donde se realiza por ejemplo, el Salone del Mobile, la llamada internacionalmente, la Milano Desing Week. Si no venís a una feria sino a caminar la ciudad, vas a estar un poquito lejos, pero nada que no se resuelva con un billete de Metro.
San Vittore
Esta parte de la ciudad es donde se encuentra la vieja cárcel San Vittore, donde estuvo preso Antonio Gramsci. Esta zona no tiene atractivos despampanantes como Brera o el centro histórico, pero es un punto neurálgico ideal para visitar las mejores iglesias de Milán: Santa María delle Grazie, la Basílica de San Ambroggio y San Maurizio al monasterio mayor. También en esta zona, el Museo Nacional de la Ciencia y la Tecnología, donde se encuentran modelos reales del genial Leonardo Da Vinci. Museo ideal para ir con chicos.
Naviglio
Zona para hacer el famoso aperitivo de Milán, los Navigli son el clásico de la ciudad, después del Duomo, el castello Sforzesco y la Galería. El Naviglio Grande se encuentra con el Navilgio Pavese y forman la Dársena, un lago artificial ideal para ir a ver el atardecer y disfrutar de la gastronomía milanesa. Mucha vida nocturna, negocios antiguos de discos de vinilo y espacios de arte bohemios, hacen de esta parte de la ciudad una de las más lindas para alojarse. Al centro se puede llegar caminando, pasando por las Columnas de San Lorenzo, o en tranvía. Se encuentran buenos precios.
Niguarda
Este no es para nada un barrio turístico y está bastante alejado del centro. Sin embargo, tiene sus particularidades que lo hacen muy especial. Por un lado, el Parque Norte, el pulmón verde de la ciudad, ideal para disfrutar un poco de la naturaleza. Por otro lado, Niguarda es el barrio obrero por excelencia y está lleno de historias de revolución y resistencia. Hay cooperativas obreras y grandes murales que recuerdan la gesta de liberación del nazi-fascimo; se puede vivir de cerca la verdadera vida de la ciudad y sobre todo, pagar precios más bajos. Si se viaja en auto, también es una buena opción ya que entrar con el automóvil al centro de Milán puede ser un verdadero desastre.